Capuchinas: color, sabor y protección natural en un solo rincón del jardín Las capuchinas son pura energía en tonos naranjas, amarillos y rojos. No solo embellecen el jardín, también lo protegen, alimentan y aromatizan. Beneficios que enamoran: Repelen plagas actuando como cultivo trampa pulgones, orugas, mosca blanca. Atraen polinizadores: abejas y mariposas adoran sus flores. Fáciles de cuidar: prosperan incluso en suelos pobres y secos. Comestibles y medicinales: hojas, flores y semillas llenas de vitamina C, antioxidantes y sabor. Cómo aprovechar cada parte: Flores: decoran ensaladas, sopas y platos con su toque picante. Hojas: perfectas en sándwiches, pestos o tortillas. Semillas: encurtidas como alcaparras caseras o molidas como especia. Cultivo sin complicaciones: Siembra en primavera, después de las heladas. Prefieren suelo pobre y bien drenado. Pleno sol = más flores. Riego moderado, sin encharcar. Cuidados rápidos: Retira flores secas para estimular nuevas. Si hay pulgones, basta con un chorro de agua. Cosecha flores abiertas y hojas jóvenes. Más allá del jardín: Tintes naturales para telas. Ramos decorativos. Infusiones herbales y vinagres aromatizados. Las capuchinas son belleza viva, sabor fresco y equilibrio natural. Una sola planta que embellece, protege y alimenta.

Capuchinas: color, sabor y protección natural en un solo rincón del jardín

Las capuchinas son pura energía en tonos naranjas, amarillos y rojos. No solo embellecen el jardín, también lo protegen, alimentan y aromatizan.

Beneficios que enamoran:
Repelen plagas actuando como cultivo trampa pulgones, orugas, mosca blanca.
Atraen polinizadores: abejas y mariposas adoran sus flores.
Fáciles de cuidar: prosperan incluso en suelos pobres y secos.
Comestibles y medicinales: hojas, flores y semillas llenas de vitamina C, antioxidantes y sabor.

Cómo aprovechar cada parte:
Flores: decoran ensaladas, sopas y platos con su toque picante.
Hojas: perfectas en sándwiches, pestos o tortillas.
Semillas: encurtidas como alcaparras caseras o molidas como especia.

Cultivo sin complicaciones:
Siembra en primavera, después de las heladas.
Prefieren suelo pobre y bien drenado.
Pleno sol = más flores.
Riego moderado, sin encharcar.

Cuidados rápidos:
Retira flores secas para estimular nuevas.
Si hay pulgones, basta con un chorro de agua.
Cosecha flores abiertas y hojas jóvenes.

Más allá del jardín:
Tintes naturales para telas.
Ramos decorativos.
Infusiones herbales y vinagres aromatizados.

Las capuchinas son belleza viva, sabor fresco y equilibrio natural. Una sola planta que embellece, protege y alimenta.

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *